martes, 4 de mayo de 2021

OJO CON EL CLIENTE… SI ES TU PARIENTE

Una regla básica para todo creativo publicitario, es “no involucrarse”, es decir, no ser parcial, porque a veces se piensa que uno tiene que “estar del lado del cliente”, para poder hacer mejor las cosas, conocerlo a fondo a él y al producto….



Es verdad que uno debe saberlo todo sobre el producto, pero también ha de saberlo sobre el mercado de este y el público al cual se dirige, además del mercado en general y sus diversos públicos…

Cuando digo “no involucrarse”, me refiero a que el creativo publicitario debe tener cuidado para que sus gustos personales o a veces sus también lazos personales no interfieran en su trabajo, porque he visto, por desgracia, a personajes que por cercanía familiar y un equivocado “tomar partido”, no tienen la rigurosidad que deberían y se convierten en un parcial más, que no discierne correctamente…

La creatividad publicitaria necesita del involucramiento y la distancia. Resulta curioso, pero estas dos condiciones han de darse, si se quiere conseguir un producto creativo equilibrado y efectivo.

A veces es preferible, si se llegara a dar el caso de una relación familiar, encargar el trabajo creativo a quien esté “alejado” del producto y su entorno, aunque sin dejar por eso la supervisión, porque como dice el refrán “El ojo del amo engorda al caballo”.


Imagen: recreoviral.com