En publicidad y en todo, tan importante es el fondo –el “qué”- como lo es la forma o, el “cómo”. Esto que parece algo lógico, no es lo que hacemos siempre, y en publicidad, que es básicamente una manera de COMUNICAR y que debe ser eficiente (además de efectiva) hay que tener muy en cuenta esto…
Bastante
largo, lo anterior, para decir que, en publicidad, la forma es importantísima.
Es como el vestido o los adornos que usa una persona, y le dan un ASPECTO
agradable, ATRAYENTE. Es el envoltorio hermoso y brillante de un chocolate, que
lo hace atractivo y deseable…
Si el
“qué” no ofrece dudas, el “cómo” marcará la diferencia entre los
innumerables “qué”, similares o existentes
y lo resaltará. Por eso, la publicidad presta especial atención a la forma y es
aquí donde la creatividad juega un papel central. Esos spots de televisión y
avisos que vemos o escuchamos, son los envoltorios, el ropaje y adornos del
producto o servicio publicitado y su misión, primero, es llamar la atención,
para a renglón seguido convencer, logrando así que el ciclo de la comunicación,
que termina en el ENTENDIMIENTO del o los mensajes. Porque –no me cansaré de
decirlo- la publicidad NO VENDE, sino que COMUNICA, se cierre.
Venden,
los vendedores.
Manolo Echegaray
Imagen: abc.es